¿Cuándo fue que nos quedamos a oscuras? ¿Cuándo sucedió?... Con el sol dormíamos y con la luna y las estrellas amábamos. Todo funcionaba al revés; las historias, los amores, la alegría y la tristeza. El mercado abría al atardecer y cerraba después del amanecer, cerca de las 9 de la mañana.
Era difícil, pero ya nos habíamos acostumbrado. Según la teoría nos acostumbramos a algo cuando ya le restamos importancia.
Los que la pasaban realmente mal eran los pájaros, que se habían quedado sin miguitas de pan en las plazas, ya que de día nadie le daba de comer, porque todos dormían.
Para los vagabundos había resultado raro vivir de día, aunque ya se habían aburrido de la oscuridad. Adueñarse del sol y su calor era la misión, deslumbrarse con nuevos horizontes que hasta entonces no conocían su alegría; lograr quitarse la mochila del marginado y cargarla de luz. Valoraban el silencio y el canto de las aves.
¿Y los sueños? Ellos se habían adaptado sin problemas, de día trabajaban y en la noche se hacían realidad.
Una noche salió el sol, y la luna sentada sobre el oeste le dijo…
-¿Que estás haciendo aquí por estas horas?-, -Vine de visita…-, respondió el sol. –¿De visita? En busca de que…-, -En busca de vos, un poco de vos, te necesito…necesito tu luz, tu abrazo, tu mirada…-
En un abrir y cerrar de ojos, la luna se poso sobre el sol y se produjo un eclipse que confundió a la ciudad entera. ¿Bailamos de día o bailamos de noche?, preguntaban las bailarinas del Table Dance; ¿Se almorzaba o se cenaba? Consultaba Doña María; ¿Se jugaba o se dormía? Gritaban los niños.
¿Porque fue día y no noche?, ¿porque de noche y no de día? ¿Quién dictaba las reglas antes de la revolución del Sol y de la Luna?
Algo está pasando en China…
MG
